sábado, 12 de septiembre de 2009

Una parodia contra el juicio a doce personas acaba con cuatro detenidos

La aparición de «Nuestra Señora de la Okupación» en un balcón de Alde Zaharra de Iruñea, que luego fue llevada en procesión, marcó el inicio de una parodia contra el próximo juicio a doce personas por realizar una sentada. Tras la parodia, cuatro personas se encadenaron en el kiosko de la Plaza del Castillo, hasta que la Policía española cortó las cadenas y se los llevó a comisaría.

Iñaki VIGOR/Gara

«Por acciones como ésta pueden caer multas de cientos de euros y penas de cárcel», denunció uno de los jóvenes que se había encadenado al kiosko para denunciar el juicio del próximo día 17 contra doce personas. Poco después, una veintena de agentes de la Policía española cortaba las cadenas y se llevaba detenidas a las cuatro personas que habían participado en esa acción, entre gritos de «atxilotuak askatu» por parte de otros muchos jóvenes que habían apoyado esta acción.

La protesta contra el juicio del próximo día 17 había comenzado poco después de las 19.00 en la Plaza de San José. Decenas de personas realizaron una procesión festivo-reivindicativa hasta la Plaza del Castillo, donde ya esperaban varias dotaciones policiales. En la procesión fue portada «Nuestra Señora de la Okupación», e incluso se repartieron unas estampitas con su imagen y el añadido de «libra esta casa de toda especulación».

Mientras varias personas realizaban una sentada en la Plaza del Castillo y una parodia, con «obispo» incluido, otras colocaron dos pancartas gigantes colgadas de los tejados, con los lemas «Barcina encarcela la crítica» y «Gaztetxea bai, hemen eta Barañainen».

Una vez concluida la parodia, varias personas se encadenaron al Kiosko de la Plaza del Castillo y explicaron por megafonía los motivos de la acción. También corearon gritos, acompañados por decenas de personas, como «en esta ciudad no se puede respirar», «cueste lo que cueste, tendremos un gaztetxe» y «ardo gorri naparra, Don Simón kanpora», en alusión al jefe de la Policía Municipal de Iruñea, Simón Santamaría.

Uno de los jóvenes encadenados dijo que es «incalculable» el montante de las multas que están imponiendo en Iruñerria por realizar acciones de protesta pacíficas, e hizo un llamamiento a participar en las movilizaciones contra el juicio del día 17. Poco después, él y tres compañeros eran introducidos en un furgón policial y trasladados a comisaría, donde pasaron la noche a la espera de ser puestos hoy a disposición judicial. La Policía Municipal se encargó de retirar las pancartas.

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