Juanjo BASTERRA | Gara
Los datos sobre los costes laborales de 2008 del INE confirman que los salarios medios de los trabajadores están muy alejados de los que obtienen los directivos y cargos políticos de diferentes administraciones públicas. En Araba, Bizkaia y Gipuzkoa el salario medio de un trabajador alcanzó los 25.288,7 euros anuales y en Nafarroa, 23.040,95 euros. Además, al menos un tercio de los trabajadores percibe salarios no superiores a 14.000 euros, dado que cuenta con ingresos inferiores a los mil euros mensuales.
Los trabajadores vascos cobran de media entre 1.402 euros y 3.650 euros más que la media de los del Estado español, donde se percibe unos emolumentos medios de 21.638,86 euros, pero también cotizan entre 783 euros y 1.138 euros más que la media. Los salarios más bajos están en Extremadura (17.951,19 euros anuales). El coste total neto con cotizaciones, gastos de formación, entre otros, alcanza en Hego Euskal Herria entre 31.0876,89 euros anuales y 34.203,58 euros.
Diferentes líderes empresariales y financieros han manifestado en repetidas ocasiones antes y también en la crisis económica actual que los salarios de los trabajadores deben reducirse para hacer más viables las empresas. Sin embargo, la remuneración directa de los ejecutivos y directivos de las compañías no caen, sino que se mantienen en niveles muy elevados.
Comparación
Si comparamos los salarios, un trabajador vasco cobra 91 veces menos que un consejero ejecutivo (2,2 millones) de una compañía del Ibex 35; aunque si nos fijamos en las dos empresas de referencia con sede social en Bizkaia, como Iberdrola y BBVA, se obtiene que sus máximos directivos -José Ignacio Sánchez Galán y Francisco González- percibieron en 2008 una remuneración total entre 279 y 844 veces mayor que la media de los trabajadores. Es decir, con el sueldo de ambos se puede financiar una empresa de mil trabajadores, por ejemplo.
Un alto directivo, por otro lado, percibe 28 veces más que un trabajador (675.000 euros de media anual). Un consejero de una compañía cobra 21,5 veces más que un trabajador, hasta 521.000 euros al año. Mientras que un directivo medio recibe más de 125.000 euros al año, es decir entre 5 y 6 veces más que un trabajador. Un político con cargo en una administración pública obtiene entre 95.000 y 115.000 euros al año, lo que significa 4,5 veces más que la media de un operario vasco.
Si comparamos los salarios de los altos directivos con quienes perciben la renta básica o la pensión de viudedad, que es una cantidad baja, las diferencias se disparan. Una viuda percibe 250 veces menos que un consejero ejecutivo de una empresa del Ibex 35, por ejemplo o 12 veces menos que un dirigente de una administración pública. Los datos oficiales han puesto de manifiesto la astronómica desigualdad que existe y, sobre todo, que los salarios de los trabajadores no son los que han generado la crisis económica.
El informe del INE pone de manifiesto, por otro lado, que los salarios medios del sector del suministro eléctrico, de gas, vapor, etc, son los más elevados, hasta los 49.115,56 euros, y la media salarial de las actividades financieras y de seguros se encuentra en 42.273,97 euros. Por el contrario, los servicios de hostelería se reducen a 13.785,95 euros al año.
Por otro lado, la encuesta anual de coste laboral refleja que la diferencia de los salarios entre los trabajadores de las empresas pequeñas y las grandes compañías supone una media de más de 9.000 euros al año, en favor de los trabajadores de las empresas de mayor tamaño.
En el informe se pone de manifiesto dos claves importantes en cuanto a los costes laborales. Así, se determina que los empresarios vascos destinan más recursos económicos para despedir a los trabajadores que para llevar adelante su formación profesional para adecuarse a los nuevos procesos productivos. Y, por otro lado, que obtienen más subvenciones que los empresarios españoles.
El INE destaca que el gasto por indemnización por despido en Nafarroa supone una media de 107,58 euros por trabajador y en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa esa cantidad se eleva a 236,19 euros. Sin embargo, en el Estado español el coste laboral atribuido a los despidos es muy superior al que se produce en Hego Euskal Herria, porque asciende a 339,06 euros de media por trabajador.
Pero, además, esos datos ponen de manifiesto que los empresarios vascos, que pagan indemnizaciones económicas bajas, destinan menos a a la formación profesional de los trabajadores. En Nafarroa, la media llega a 102,43 euros para formación profesional por trabajador y en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, a 120,92 euros. En el conjunto del Estado español está sólo un poco por debajo, ya que se destina de media 104,49 euros.
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