sábado, 8 de mayo de 2010

Entrevista al camarada Ganapathy, Secretario General del PCI (Maoísta)

“Si la revolución Maoísta en la India logra avanzar a una nueva etapa, se convertirá en una grave amenaza para el sistema capitalista mundial”

Leído en el blog comunista camarada ODIO DE CLASE

http://odiodeclase.blogspot.com/2010/05/entrevista-al-camarada-ganapathy.html

En enero de este año los periodistas y activistas democráticos Jan Myrdal y Gautam Navlakha realizaron una extensa entrevista al camarada Ganapathy, Secretario General del Partido Comunista de la India (Maoísta). En esta entrevista el camarada Ganapathy habla de la situación actual de la Revolución de Nueva Democracia en la India, sus dificultades y sus perspectivas. También relata la historia de su Partido y las importantes lecciones que han obtenido de su desarrollo, las que son lecciones también para todos los comunistas del mundo.Publicamos a continuación algunos extractos de esta entrevista, agrupados temáticamente y presentados aquí no necesariamente en el orden exacto en que son expuestos por el camarada Ganapathy.La selección y traducción es propia a partir del texto en inglés publicado en http://indianvanguard.wordpress.com/

La traducción completa de esta entrevista puede ser consultada en nuestro sitio web http://www.nuevademocracia.urc.cl/

Sobre la Revolución India y el Partido Comunista de la India (Maoísta)

Nuestro Partido unificado, el Partido Comunista de la India (Maoísta) se formó el 21 de septiembre de 2004 por la fusión de dos corrientes revolucionarias maoístas de la India, el Partido Comunista de la India (Marxista-Leninista) [PCI (ML)] y el Centro Comunista Maoísta [CCM]. Nuestros amados líderes fundadores y maestros, camaradas Charu Mazumdar y Kanhai Chatterji, encabezaron una incesante lucha ideológica y política durante mucho tiempo contra el revisionismo y el moderno revisionismo del Partido Comunista de la India [PCI] y el PCI (Marxista) [PCM]. Únicamente a través de esta lucha la columna vertebral de los partidos revisionistas pudo quebrarse, lo cual se tradujo en un avance en el movimiento comunista indio. Como resultado de esta gran lucha en todos los ámbitos impulsada por el camarada Charu Mazumdar y otros maoístas auténticos, el gran levantamiento de campesinos armados de Naxalbari irrumpió como un trueno de primavera. Entonces comenzó una nueva historia. En adelante nuestros dos grandes líderes sostuvieron la bandera roja de Naxalbari y dirigieron la Revolución de Nueva Democracia. El movimiento revolucionario se extendió como el fuego sobre las praderas en diferente escala a casi todas partes del país. Durante este curso revolucionario, en un breve periodo de tiempo se fundaron dos Partidos bajo la dirección directa de los compañeros Charu Mazumdar y Kanhai Chatterji: el PCI (ML) y el CCM, el 22 de abril de 1969 y el 20 de octubre 1969, respectivamente. Debido a varias razones históricas no fue posible formar un Partido Maoísta unificado en ese mismo momento. Pero nuestra base ideológica y línea política, el camino y estrategia de la revolución, y varias otras posiciones de base sobre las cuestiones fundamentales con que nos enfrentamos al mismo tiempo, eran básicamente las mismas.

Las clases gobernantes indias desataron su reino de terror a todos los movimientos revolucionarios desde el levantamiento armado de Naxalbari. A finales de 1972, tras la detención y muerte del camarada Charu Mazumdar y también antes, perdimos un gran número de dirigentes y cuadros en manos del enemigo. Debido a estas pérdidas sufrimos un revés en todo el país. Antes de la muerte del camarada Charu Mazumdar, en 1971, se inició una intensa lucha interna política e ideológica contra la camarilla archi-oportunista de derecha de Satya Narain Singh y otros. El partido se desintegró en varios grupos debido a serios errores tácticos nuestros, por efectos del terrorismo de Estado, de las numerosas pérdidas, la falta de liderazgo apropiado y el negativo resultado de la lucha de dos líneas al interior del Partido Comunista de China. Desde julio de 1972 a 1980 nuestro Partido, el PCI (ML) fue dominado por disidentes, la mayoría de ellos conducidos por la derecha y el aventurerismo de izquierda y la confusión se extendió. Pero por otro lado, bajo la dirección de CCM tuvo lugar la lucha campesina armada revolucionaria en Kanksha, que en un corto período de tiempo sufrió un revés debido al terrorismo de Estado, pero que paulatinamente se expandió a Bihar y en cierta medida a Assam y Tripura.

Nosotros sostuvimos las bases ideológicas y la línea política de un verdadero Partido Maoísta, aprendimos las lecciones de la práctica, nos mantuvimos seriamente comprometidos con la lucha de clases y defendimos firmemente las posiciones correctas sobre las varias cuestiones ideológicas y políticas que se enfrentan en el país y en la arena internacional. Debido a estas posiciones sólo a partir de la corriente del PCI (ML) pudieron surgir en 1978 el PCI (ML)-Partido Unidad [PCI (ML) - PU] y el 22 de abril 1980 el PCI (Guerra Popular) [PCI (PW) por sus siglas en inglés, People’s War]. Solamente el CCM y los partidos Guerra Popular y Unidad construimos un movimiento armado agrario revolucionario en diferentes partes del país, principalmente en Andhra Pradesh y Bihar. Entre los años 1980 y 1990 fortalecimos considerablemente nuestro Partido, el movimiento revolucionario de masas y la lucha armada, culminando en una gran unidad y la formación de nuestro nuevo Partido en septiembre de 2004. Desde 1977 un gran número de verdaderas fuerzas maoístas se fundieron y consolidaron en el PCI (PW), en el CCM y el PCI (ML)-PU y este proceso aún continúa en cierta medida después de la formación del nuevo Partido. [...]

En el Partido maoísta indio hemos recorrido un camino tortuoso por largo tiempo. Después de la formación del Partido Unificado ha surgido una situación más favorable para el avance de la revolución. Perdimos esta buena oportunidad entre 1969 y 1972. Esta fusión nos ha entregado la síntesis de más de 35 años de experiencia de la revolución india. Nos ha dado documentos básicos enriquecidos en términos de estrategia, tácticas y políticas. Nuestra fusión trajo consigo un cambio significativo al pasar de dos partidos diferentes trabajando en áreas separadas y lejanas o en pequeños reductos a un Partido con carácter nacional. Antes de la fusión, a pesar de que ambos Partidos tuvieran Comité Central, existía una seria limitación para funcionar como Órganos Centrales con perspectiva de toda la India. Pero después de la fusión, nuestra comprensión se enriqueció mucho más con el concepto de desarrollo desigual del país y de desarrollo desigual del movimiento revolucionario. Ahora podemos planificar de mejor manera a nivel de toda la India. La tarea no está completa, pero al menos los inconvenientes han sido eliminados. [...]

La revolución en la India es parte de la revolución proletaria mundial

En China, las condiciones en que tuvo lugar la Larga Marcha a Yenán, se creó una base y se conformó un Frente Único con Chiang Kai-Shek a nivel nacional son diferentes a nuestra situación actual de la Revolución de Nueva Democracia de la India. La revolución china tuvo lugar en la primera mitad del siglo XX. Desde entonces se han producido importantes cambios en el mundo. Esos son en primer lugar la emergencia de un campo socialista y su posterior caída, en segundo lugar la caída del colonialismo y el surgimiento del neocolonialismo, en tercer lugar la aparición del denominado sistema parlamentario como el sistema político común en todo el mundo, en cuarto lugar, se ha producido una larga brecha en el ascenso revolucionario después del triunfo de las revoluciones en Vietnam, Camboya y Laos, a pesar de algunos brotes y significativas luchas en varios países. Si nos fijamos en la historia del mundo entero, después del surgimiento de la clase obrera en el globo se desarrollaron enfrentamientos con la burguesía y todas las fuerzas reaccionarias hasta alcanzar el poder en París durante un corto tiempo y luego en Rusia, China y varios países de Europa durante mucho tiempo, lo cual conmocionó al mundo entero. En esta trayectoria hay muchos altibajos en la Revolución Socialista Mundial pero sin embargo es una lucha continua. Es como olas unas veces y más lento otras, pero nunca cesa. Así es que tenemos que ver cualquier revolución de un país a la luz de este contexto histórico. [...]

Las favorables condiciones revolucionarias, el ascenso generalizado en la lucha de clases en la sociedad india y el desarrollo de la lucha armada están siendo intensamente observados por el enemigo que se lo está tomando más en serio. Por lo tanto, ninguna oportunidad se está dando a estas luchas por parte de las clases gobernantes indias, que son compradores del imperialismo. En el contexto inmediato de la revolución mundial y recogiendo las experiencias de Filipinas, Perú, Nepal y la India, el imperialismo está muy preocupado por el desarrollo de la encarnizada lucha de clases que emerge en la India. En la situación actual del mundo, si la revolución maoísta en la India logra avanzar a una nueva etapa, se convertirá en una grave amenaza para el sistema capitalista mundial. Por eso el imperialismo ha tomado en serio estos acontecimientos, en particular los Estados Unidos. [...]

Sobre el desarrollo del Partido

[...] En 1980 el partido estaba intentando salir de un revés. Se trataba de reorganizar y consolidar. Por un lado, estaba el problema del sectarismo y por el otro, las bases de apoyo se habían perdido en gran medida. Así que tuvimos que revivir todo en términos de lucha de masas y en términos militares. En consecuencia, nuestra táctica también cambió. En ese momento se habían iniciado principalmente las luchas anti-feudal y la agitación y propaganda anti-imperialista para crear movimientos amplios y una opinión contra el Estado en las zonas urbanas.

Anteriormente, en la época del camarada Charu Mazumdar, la línea había sido desestimar las organizaciones de masas. Más tarde hemos repensado y después de pasar por una profunda revisión autocrítica, reconocimos que había algunos errores en los primeros años y sobre esa base hemos reconstruido el movimiento a fin de avanzar. La autocrítica se hizo en 1974, pero fue en agosto de 1977 que las fuerzas en el partido terminaron de convencerse. En la práctica fue reafirmado por el Partido en la Conferencia Estatal de Andhra Pradesh en septiembre de 1980, lo que marca el comienzo de una nueva práctica.

Fue desde entonces que vimos el desarrollo de una perspectiva, teniendo en cuenta la especificidad concreta de la India. Sólo había unos pocos dirigentes experimentados que habían quedado de los días del camarada Charu Mazumdar. Muchos de ellos habían entrado en desviación de la derecha, otros en desviaciones de izquierda y sólo unos pocos habían venido con nosotros. Así que, en gran parte se trataba de una nueva generación, una nueva juventud, y para convertirlos en cuadros con experiencia debió invertirse mucho tiempo [...] Sólo tras 6-7 años, una dirección adecuada surgiría en el contexto del PCI (PW).

En primer lugar un partido revolucionario necesita una dirección para la comprensión de las condiciones nacionales e internacionales, así como las condiciones económicas y políticas para desarrollar tácticas de acuerdo con estas condiciones [...] En segundo lugar, un partido revolucionario tiene que organizar al pueblo y conducir la lucha de clases [...] En tercer lugar, para un partido revolucionario es importante organizar la lucha armada.

Más tarde en la medida en que desarrollamos la lucha de clases de acuerdo con la idea de conquistar el poder en amplias áreas, construir ejército popular, el PCI (PW) aquí y el CCM allá comenzaron a construir batallones guerrilleros a nivel de 5,7,9,11. Algunos pelotones y zonas guerrilleras surgieron de esta manera. En algunas zonas, justo antes de la fusión de 2004, incluso surgieron compañías. El antiguo PCI (PW) tuvo el Ejército Guerrillero Popular (People’s Guerrilla Army, PGA) mientras que el CCM tuvo el Ejército Guerrillero de Liberación Popular (People’s Liberation Guerilla Army, PLGA). En el proceso de fusión establecimos el PLGA bajo la dirección del PCI (Maoísta). La siguiente etapa es movilizar progresivamente batallones hacia la formación de un Ejército de Liberación Popular (People’s Liberation Army, PLA). De acuerdo con los principios básicos, hemos pasado a las etapas superiores del poder político y militar y del poder político del pueblo. Esta visión estaba allí incluso antes de los 80. El CCM también estaba allí. Pero en la práctica se logró sólo en términos del desarrollo concreto posterior a la fusión.

Hay otros dos hechos que me gustaría señalar. Un partido que en la práctica se está desarrollando tácticas o políticas que involucran a las amplias masas en sus filas tiene que practicar el involucrar al pueblo en miles y cientos de miles. En la práctica, al tiempo que afrontamos el problema y al mismo tiempo corregimos los errores se desarrolla una aguda lucha interna y externa. Es sólo a través del proceso de esta aguda lucha ideológica y política que hemos llegado a la posición de hoy. Después de la rectificación y revisión de los 70, surgió el PCI(PW) que debió enfrentar graves crisis internas en forma de 1) El sectarismo y dogmatismo a mediados de los años 80, y 2) el obstáculo que plantea la dirección del camarada Kondapalli Seetharamiah a principios de los años 90. Por otra parte, los enfrentamientos entre el CCM y el PCI (PW) han sido una amarga e perdurable experiencia, un capítulo negro en la historia. Para hacer frente a desafíos ideológicos y políticos, el partido tácticamente desarrolló dos enfoques: la discusión y el examen, y la lucha. En cada ocasión del partido emergió de la crisis con éxito. [...]

Anteriormente, junto con la lucha contra el revisionismo nos enfrentamos con el problema de tener una línea que sólo hablaba de tomar el poder del Estado y que suponía que otros problemas políticos como la cuestión nacional, el problema de la mujer, los dalit (intocables o castas) y la cuestión de las minorías religiosas se abordarían automáticamente por añadidura. Sin embargo, posteriormente rectificamos esta posición y se fusionaron las consignas de largo plazo con las consignas inmediatas. Esta era una necesidad para el éxito de la Revolución de Nueva Democracia y el desarrollo de ésta. Mientras que varios otros grupos ML sólo levantaban consignas inmediatas y se deslizaron hacia el reformismo, nosotros durante mucho tiempo sólo levantamos las consignas de largo plazo. Pero ahora, al poner juntas las consignas inmediatas y las consignas de largo plazo nos movemos hacia un desarrollo superior.

En la actualidad en nuestro país otros partidos maoístas no están en condiciones de proporcionar el liderazgo a las masas debido a su línea desviacionista de derecha y fuerza limitada. Las fuerzas progresistas y democráticas carecen de cualquier programa básico para la acción revolucionaria y también en la actualidad están teniendo un área limitada de influencia. Además de todas estas limitaciones ninguno de estos partidos tiene la fuerza del pueblo en armas para defenderse. Reitero que en la actualidad ningún Partido u organización tiene capacidad suficiente para ser centro de todas las fuerzas revolucionarias, democráticas, progresistas y patrióticas y el pueblo. Por lo tanto, ante las circunstancias actuales nuestro partido puede jugar un papel importante en aunar a todas las fuerzas revolucionarias, democráticas, progresistas, las fuerzas patrióticas y al pueblo. Esto es así porque nuestro partido tiene un carácter nacional, una buena base política de masas en varios Estados, un Ejército Guerrillero Popular de Liberación que combate al enemigo en varios Estados y hace emerger el Poder Popular de Nueva Democracia en Dandakaranya [una zona en el centro de la India, que comprende los distritos predominantemente tribales de cinco estados a saber, Andhra Pradesh, Chhattisgarh, Madhya Pradesh, Maharashtra y Orissa], Jharkhand y algunos otros lugares de la India. Tenemos una comprensión clara de unificar todos los revolucionarios, demócratas, progresistas, las fuerzas patrióticas y todas las comunidades oprimidas, incluidas las nacionalidades oprimidas contra el imperialismo, el feudalismo y el capitalismo burocrático-comprador. Nuestro nuevo Frente Único Democrático consta de cuatro clases democráticas, a saber, obreros, campesinos, pequeña burguesía urbana y burguesía nacional. Si queremos formar un Frente Único fuerte, entonces debe ser bajo la dirección del proletariado, en base a la alianza de obreros y campesinos. Si queremos formar un Frente Único fuerte, entonces debe ser sostenido y defendido por el Ejército Popular. Sin el Ejército Popular el pueblo no tendrá nada que alcanzar o defender. Por esto el enemigo está tratando tercamente de eliminar nuestra dirección de Partido con el objetivo de destruir un centro revolucionario y democrático del pueblo indio. Así es como las condiciones han madurado para conseguir la unidad en torno a un centro y la revolución puede llevarse adelante bajo la dirección del PCI (Maoísta).

La posición frente a las conversaciones de paz

En general el pueblo y los revolucionarios maoístas no quieren la violencia o el enfrentamiento armado con nadie. Sólo en condiciones inevitables toman las armas y resisten a sus enemigos y ahora están emprendiendo la guerra de liberación, aprendiendo de la historia. Por lo tanto, vemos esto como una guerra de autodefensa. En este contexto de guerra total, hay que reconocer que el estado de Andhra Pradesh tiene 130 mil fuerzas, hay 45 mil fuerzas en Chhattisgarh (que aumentarán en breve en más de 20 mil fuerzas), 160 mil fuerzas en Maharashtra. Así, cada estado tiene una fuerza policial que es mayor que las fuerzas nacionales de muchos países europeos. Las fuerzas especiales más crueles y peligrosas han sido capacitadas por el Estado y apoyadas con varias leyes anti-populares draconianas. Bengala, Bihar, Orissa, Jharkhand, Chhattisgarh, Maharashtra, Andhra Pradesh, junto con Uttar Pradesh y Madhya Pradesh tienen en conjunto más de 700 u 800 mil fuerzas policiales. Fuera de esto, entre 250 y 300 mil fuerzas policiales están directamente dispuestas contra el pueblo. Y junto a ellos 100 mil fuerzas paramilitares se han desplegado en estas áreas. Aquí el pueblo lucha contra contra una fuerza más fuerte que los movimientos en el noreste y Jammu Cachemira. Esta es una campaña de represión y violencia brutal encaminadas a la supresión del movimiento político del pueblo, y para la explotación de los minerales.

En este contexto, si es posible podemos buscar algún respiro. Mientras más largo sea el tiempo de descanso es mejor para el pueblo. El trabajo democrático necesita este contexto. Pero mientras el gobierno sostiene una metralleta en su mano no se puede hablar de esto. El pueblo va a seguir luchando. Mientras lancen balas el pueblo no dejará las armas ni se rendirá. Todas las fuerzas democráticas y progresistas, las fuerzas patrióticas necesitan unirse y luchar contra la guerra total contra el pueblo que desarrollan los gobiernos central y estatales. Para decirlo de forma concisa, las principales demandas que el partido ha puesto al gobierno para cualquier tipo de conversaciones son: 1) La guerra total tiene que ser detenida; 2) Para cualquier tipo de trabajo democrático, la prohibición del Partido y las organizaciones de masas han de ser levantadas, y 3) la detención ilegal y tortura de compañeros debe ser detenida y éstos deben ser puestos en libertad inmediatamente. Si estas exigencias se cumplen, los mismos dirigentes que son liberados de las cárceles podrán dirigir y representar al Partido en las conversaciones.

Sobre la estrategia de la Guerra Popular Prolongada en la India[...]

En la actualidad, el principal obstáculo en el camino de la revolución india es la guerra total desencadenada por el enemigo. Esta guerra es principalmente contra el movimiento maoísta, pero no se limita a este movimiento, se dirige contra todos los movimientos revolucionarios, democráticos, progresistas y patrióticos y los movimientos de las comunidades oprimidas de nuestra sociedad, incluyendo las nacionalidades oprimidas. En este momento, todas estas fuerzas tienen que pensar juntos cómo hacer frente a este enemigo poderoso y de esta manera encontrar la forma de alcanzar la unidad a fin de avanzar. [...]

Esta guerra es para destruir la revolución que está surgiendo como un poder político alternativo al actual poder político reaccionario en el país y al saqueo masivo de minerales y otras riquezas naturales de las vastas áreas de los pueblos Adivasi y otros pueblos desde Lalgarh a Surjagarh . Están imponiendo esta guerra contra aquellos que están en contra de esta guerra, es decir, los revolucionarios maoístas, adivasi y la población local de las vastas zonas forestales, obreros, campesinos, clase media urbana, pequeña y mediana burguesía, los dalit, las mujeres, las minorías religiosas y las nacionalidades oprimidas, las organizaciones democráticas, las fuerzas progresistas y patrióticas, quienes constituyen más del 95% de la población. Es completamente una guerra injusta. Esta guerra es impuesta por la burguesía burocrática-compradora, las fuerzas feudales de este país y los imperialistas, especialmente Estados Unidos. [...] Estos planean continuar con esta guerra durante mucho tiempo hasta lograr su objetivo.

Ningún maoísta, demócrata, progresista, patriota, ni el pueblo aceptarán esta guerra injusta impuesta por los gobernantes. [...] Será desafiada por todo el pueblo de nuestro país y por los pueblos del mundo. Esta guerra injusta es totalmente en contra de los intereses del pueblo y los intereses del país. El pueblo se une y la lucha contra esta guerra injusta desarrollando una guerra justa. [...] El objetivo inmediato de la guerra justa es derrotar a la guerra injusta por completo y, a continuación avanzar hacia cambiar las condiciones sociales actuales que dan campo a las guerras injustas. Si nos fijamos en la evolución política del país, esta inhumana guerra total está significando un campo enorme para unir a las vastas masas populares y sin duda terminará siendo contraproducente para las clases dominantes.

También tenemos que hablar de la crisis económica mundial en curso, en particular la crisis de los imperialistas de EE.UU. y otros países imperialistas. Esta crisis es en ciertos aspectos aún más profunda que la gran depresión de 1930. Pero el capitalismo no muere por sí solo sin una revolución. Ahora, para salir de esta crisis el imperialismo tratará de aumentar la explotación de la clase trabajadora y la clase media de sus propios países y aumentar el saqueo de los países del tercer mundo. Las corporaciones multinacionales y la burguesía burocrática-compradora, los colaboradores de los imperialistas, están concentrados en las grandes áreas que se extienden desde Lalgarh en Bengala a Surjagarh en Maharashtra. Para explotar esta rica región, principalmente la región adivasi (tribal), el Estado y el gobierno central han firmado cientos de MOUs (Memorandos de Entendimiento). El saqueo indiscriminado de esta región va a destruir el medio ambiente y traerá cambios ecológicos a largo plazo. La comunidad más oprimida de la sociedad india, los adivasi y los pueblos locales están bajo gran amenaza. Probablemente por primera vez en el mundo, tan enorme población de los pueblos indígenas está siendo amenazada. Una nueva situación se está creando y con un programa concreto estos sectores oprimidos avanzarán. Es evidente que sin la emancipación de estos pueblos, no podemos avanzar ni llevar al triunfo la revolución india. Nuestro partido está trabajando en este problema y cada vez más personas se unen y luchan contra los archi-enemigos del pueblo indio, a saber, los imperialistas, la burguesía burocrático-compradora, los feudales y el Estado fascista.

Los pueblos del noreste y las nacionalidades oprimidas de Cachemira vienen luchando por su liberación por décadas. Han avanzado en cierta medida y han enfrentado sufrimientos sin precedentes. Pero no han conseguido tener éxito y aún así continúan con su lucha. Puesto que hemos tenido algunos éxitos en la guerra de guerrillas, ellos (las nacionalidades oprimidas) ven esperanzas en los maoístas. Hay una nueva esperanza en que si la revolución maoísta avanza, se acelerará también las luchas de liberación nacional. En este contexto, de conformidad con el marxismo-leninismo-maoísmo, el Partido ha mantenido siempre la posición del derecho a la autodeterminación, incluida la independencia de todas las nacionalidades oprimidas. Ellos entienden esta política y es necesario reforzar su lucha. Esto tiene que ser esgrimido para unirse con ellos y bregar por un frente único. [...] Estratégicamente se están creando mejores condiciones para unir a los pueblos de todas las nacionalidades con los obreros, campesinos, la clase media y los capitalistas nacionales, mientras la represión por doquier se está convirtiendo gradualmente en algo contraproducente para el propio gobierno.

Más aún, el enemigo ha declarado la guerra total contra el pueblo en el nombre de la seguridad interior y en nombre del peligro de los maoístas. Somos relativamente fuertes en varias zonas rurales del país, pero en la actualidad nuestras fuerzas son débiles en las zonas urbanas y también somos débiles entre los obreros y entre la pequeña burguesía. El Ejército Popular también es débil y sus armas son inferiores a los del enemigo. Estos son nuestros puntos débiles en general. Reforzar el ejército del pueblo y el trabajo en las zonas urbanas son algunas de las tareas urgentes más importantes. El Congreso de Unidad de nuestro Partido ha anunciado claramente un plan estratégico y ha entregado a los enriquecidos documentos para mejorar en estos campos. Por otra parte, las contradicciones sociales se están agudizando muy rápido. Junto con las tareas urgentes ya descritas, nuestro partido se está concentrando en unir más y más personas. Si tenemos éxito en esto, podemos dar un salto en la revolución. Tenemos esperanzas en el surgimiento de un frente único. En esta nueva situación, es una de las tareas más importantes de la revolución en la India. Estamos convencidos de que no es sólo nuestra tarea, sino la tarea de todas las fuerzas revolucionarias, democráticas, progresistas. [...]

He descrito donde reside nuestra principal fortaleza. Pero la fuerza física también es necesaria para luchar. Necesitamos un ejército poderoso y una fuerte base entre las masas junto con un Partido fuerte. Esto es una necesidad práctica. Si esto no es así fracasaríamos sin importar lo fuerte que seamos ideológicamente. Por tanto tenemos que crecer. Para ello, al tiempo que afrontamos la represión del enemigo, tenemos que usar las tácticas correctas. A nuestro juicio, el enemigo va a la guerra total. Pero está creando su propia trampa. Si podemos entender esto y manejar eficazmente nuestra guerra de guerrillas, lo conseguiremos.

En términos prácticos, hay dos cuestiones. Uno, dirigir las contradicciones de clase: Existen viejas contradicciones en la sociedad y nuevas contradicciones que surgen entre las clases dominantes que deben ser y serán utilizadas en beneficio del pueblo. Esto es necesario no sólo para derrotar al enemigo y para obtener beneficios inmediatos, sino para un objetivo revolucionario de largo plazo. Debemos fortalecer nuestras bases de apoyo y frentes que son los principales escudos de nuestro poder. El camarada Mao dijo que son decisivos para desarrollar el ejército y la guerra popular. Debemos movilizar a las grandes masas contra el enemigo y utilizar las contradicciones del enemigo para destruirlos uno tras otro.

En segundo lugar, mientras intentamos la guerra de guerrillas en Andhra tuvimos un revés, no hemos abandonado por completo, sin embargo es un retroceso. Tenemos que intensificar y ampliar la guerra de guerrillas desde el valle de Godavari (en Andhra Pradesh) de Maharashtra, Orissa, Bihar, Jharkhand hasta la frontera de Bengala Occidental. El enemigo debe ser resistido por nuestras fuerzas, pero debe hacerse de acuerdo a nuestras ventajas, basándonos en la situación concreta. En la actualidad básicamente tenemos que utilizar hábilmente la táctica de golpear y correr. Tenemos que desarrollar la guerra de guerrillas hasta la guerra de movimientos y convertir el ejército guerrillero en un ejército regular. Necesitamos la participación activa del pueblo. Nuestra fuerza reside en el pueblo. El enemigo se esforzará por encerrarnos únicamente en la confrontación armada. Y nos quieren encerrar en un área limitada. Ellos están dividiendo nuestras áreas en varias secciones y nos están cercando. Pero nosotros podemos llegar a sus campamentos base como las abejas mediante la movilización del pueblo. En las zonas donde se han instalado campamentos enemigos, incluso en esas villas, tenemos Comités Populares Revolucionarios donde el trabajo está todavía en curso. [...] Si tenemos éxito en movilizar activamente a las masas para combatir a las fuerzas enemigas, entonces se puede hacer de esta misma guerra una base para el cambio revolucionario. Definitivamente es un reto que tenemos ante nosotros, pero estamos seguros de que existe una ventaja a largo plazo que no se puede lograr en un corto período. Pero a diferencia de lo que el enemigo quiere, que es terminar esto en un corto período de tiempo, nosotros queremos prolongar esta guerra y transformar esta situación en nuestra ventaja a favor de la revolución.

Ellos están tratando de limitar nuestra área, mientras nosotros estamos tratando de ampliarla. Están construyendo el Gram Suraksha Samithis para luchar contra lo que denominan antisociales y por lo tanto están haciendo lo mejor que pueden para contenernos. Pero el pueblo nos invita. Incluso a cuadros nuevos con poca experiencia, que están escasamente armados, se les está pidiendo visitar estas zonas por el pueblo. Por ejemplo en Sonebhadra en Orissa, los propios pobladores nos invitaron. Nuestros planes para expandirnos de Raigad a Nayagad en forma de Operación Teleférico bajo la cual la incursión a Nayagad fue orquestada nos ha permitido expandirnos en esta área en tan sólo 8-10 meses. Por lo tanto, la incursión a Nayagad tenía no sólo una significación militar sino también importancia política, pues había razones estratégicas detrás de la incursión. De este modo, la operación Vikas se llevó a cabo para expandirse en el área de los llanos de Manpur (Chattisgarh). La gente nos invita y su confianza es alta. Si nos expandimos de esta manera, definitivamente vamos a crecer y expandiremos la guerra de guerrillas. Si procedemos así, y se extiende exitosamente la guerra, entonces en el largo plazo la situación política y económica deberá cambiar y bajo la presión el Estado se derrumbará. Ya en la actualidad el Estado obstinadamente derrocha en gastos militares, pero en la medida en que la guerra se expanda en más y más zonas, más va a gastar y en el largo plazo se conducirá al fracaso. Estamos librando nuestra guerra con este plan estratégico.

Sobre el frente único y los frentes tácticos[...]

El partido maoísta apuesta a convertirse en centro para el pueblo del país y su desarrollo, representa sus aspiraciones. Representamos a más del 95% de la población. No hay condición objetiva más favorable para unir al pueblo y el pueblo también quiere un partido que sirva a sus intereses. Nosotros no estamos trabajando por una reforma parcial dentro del régimen burgués y explotador. Estamos luchando por las demandas socio-económicas del pueblo, así como para el cambio cualitativo de la estructura básica de la sociedad. Si tenemos éxito en explicar esto claramente al pueblo, tendremos éxito en movilizarlo y organizarlo para la guerra y triunfaremos.

Cada vez que la guerra popular prolongada se ha librado, y también las guerras de liberación nacional, la experiencia ha demostrado que sin una base entre las masas, sin ejército, sin zonas liberadas, el pueblo no tuvo éxito en la formación de un gran frente único. En curso de la lucha revolucionaria, formando el ejército y estableciendo bases de apoyo podemos formar varios frentes tácticos e incluso un frágil frente único estratégico. Tenemos que luchar duro para movilizar a las masas en la guerra contra sus enemigos y construir ejército propio y establecer bases de apoyo estables y seguir adelante en la construcción de un gran frente único. [...]

Si buscamos una unidad lo más amplia posible no podemos tener una postura sectaria hacia quienes son amigos de la revolución de nueva democracia. En la actualidad varias fuerzas se alinean contra el enemigo. Tenemos que dejar que se desarrollen también. En el frente único para algunas cuestiones, incluso podría haber representantes de las clases opresoras. No podemos esperar que [en lo inmediato] se unan a nuestras filas, es un largo camino por delante. Ahora tenemos que atenernos firmemente a nuestro objetivo estratégico, para eso tenemos que ser flexibles tácticamente.

Más claramente, hay dos tipos diferentes de frentes. Uno en el seno del pueblo y el otro entre el pueblo y el enemigo (una sección / grupo / personas de las clases enemigas), utilizando las contradicciones entre los enemigos. El Partido tiene que hacer esto. Ese campo está allí, para utilizarlo en cierta medida en determinadas situaciones. Nosotros denominamos a esto las reservas indirectas de la revolución, las cuales pueden ser usadas con mucho cuidado. Si tenemos clara comprensión de que no son nuestros aliados de clase, entonces no debiera haber desviaciones hacia el oportunismo de derecha. Necesitamos frentes de este tipo para el éxito de la revolución. [...]

El último aspecto es que cada clase tiene sus propios intereses de clase independientes y visión del mundo. El frente único en este sentido es también un frente de lucha. Pero puesto que por encima de esto está la lucha común contra el enemigo principal, entonces [dentro del frente] la lucha se convierte en secundario, mientras que la unidad se convierte en primordial. El problema real es cómo esta lucha y unidad pueden ser equilibradas y utilizadas eficazmente. Las clases enemigas nunca se pondrán del lado del pueblo. Incluso después de la toma del poder, la lucha continuará dentro de la sociedad durante mucho tiempo. Así, el frente único y la lucha de clases deben continuar de forma simultánea. Para eso una tarea de suma importancia es concentrarse en la educación ideológica y política de las masas. Si podemos hacer esto con éxito, entonces podemos ganarnos también a estos sectores y dejar que se unan a nuestras filas. Estos partidos también mantienen a muchas personas bajo un liderazgo corrupto. Si somos capaces de ganarnos a esas personas por medio de la lucha política e ideológica, podremos ganarnos a gran parte de sus militantes. El avance revolucionario está relacionado con este proceso. Los chinos y el Partido Nepalés dieron pasos agigantados haciendo esto mismo. De este modo tanto la fuerza de los cuadros, así como el ejército pueden crecer política e ideológicamente. Si esta relación dialéctica entre el frente único y la lucha política e ideológica es manejada con cuidado, tendremos éxito en la formación de un gran frente único y aislaremos al enemigo principal. [...]

Reconocemos que somos un partido pequeño todavía. Pero nuestra verdadera fuerza radica en su ideología marxista, las clases que representa, su línea y sus políticas. Y para lograr frente único ¿cuáles son los métodos? La burguesía burocrática-compradora, los terratenientes y los imperialistas son el enemigo contra el que las grandes masas tienen necesidad de estar unidas sobre la base de línea de masas y una línea clasista. Si nos atenemos a los intereses de las masas y utilizamos correctamente la línea de masas y la línea clasista, definitivamente tendremos éxito y nos convertiremos de una pequeña fuerza en una gran fuerza nacional.

Tomada de los camaradas de NUEVA DEMOCRACIA

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