La izquierda abertzale de Sakana rechaza el cierre de la planta de Gamesa. Asegura que son varias las empresas que han dejado en la calle a los trabajadores y está dispuesta a unir fuerzas para conseguir que esa zona navarra tenga futuro, porque se han encendido ya las alarmas.
Leído en GARA
La izquierda abertzale de Sakana rechaza el cierre de la planta de Gamesa en Altsasu y alerta de la desindustrialización y el paro que se está produciendo en la zona, que profundizan en el incierto futuro de sus habitantes. En un comunicado, llama a participar en la manifestación que han convocado los trabajadores para este próximo viernes a las 19.00 en la localidad navarra y muestra su disposición «a unir fuerzas en defensa de Sakana y su futuro. Instituciones, fuerzas políticas y sindicales, agentes sociales y la sociedad de este valle tenemos que realizar un esfuerzo común para garantizar un futuro para nuestra zona y responder a las agresiones».
En el amplio análisis, la izquierda abertzale recuerda que el paro en Sakana afecta a 1.460 personas. Por eso, califican de «golpe durísimo» la decisión de la dirección de Gamesa de cerrar la planta de Altsatsu «con 150 trabajadores, pese a ser una empresa viable y con grandes beneficios». Recuerda que en 2009 el Gobierno foral navarro acepto 68 expedientes de regulación (ERE) de 58 empresas de Sakana, que afectaron a 3.500 trabajadores y en 9 expedientes se despidieron a 275 trabajadores.
Antes de Gamesa, otras empresas como Ufesa, Dinescon, Recindsa, Hisphordin, entre otras, «han cerrado su actividad en Sakana con el visto bueno del Gobierno navarro», denuncia la izquierda abertzale, que señala que «estos cierres se disfrazan y camuflan tras argumentos huecos de de crisis, o inviabilidad de las empresas, pero lo que está en el fondo de estas situaciones, es el desprecio hacia trabajadores y la utilización deshumanizada de las personas como herramientas de producción, al servicio de los intereses del capital».
Acusa al Gobierno de Miguel Sanz de «apoyar el modelo neoliberal, que facilita que los trabajadores sean tratados como elementos de usar y tirar». Para la izquierda abertzale se han encendido todas las alarmas en Sakana, por lo que reclama «tomar cartas en el asunto» más allá de empresa concretas, personas, siglas de sindicatos o de partidos políticos y «por encima de localismos. Sakana debe defender su futuro». Por eso, llaman a participar en la manifestación del viernes.
Y, a la vez, reclama, «desde la profunda convicción de que Sakana lo merece», la puesta en marcha «para impulsar el cambio social desde la izquierda, que acabe con estas prácticas abusivas del neoliberalismo e impulsemos un modelo social más justo, digno y humano».
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